« Calopterygidae (Buchecker, 1876)
Esta familia, ampliamente representada en el mundo, agrupa especies de alas brillantemente coloreadas. Estos Zigópteros se caracterizan por: alas ovaladas y sin pedúnculo, que se van estrechando regularmente hasta la base; la venación muy fina y apretada; numerosas venas transversas antenodales; espacio mediano libre; el pterostigma ausente o blanquecino y apenas indicado en la hembra (pseudopterostigma); cuerpo de coloración azul, verde o negruzca con reflejos metálicos. El dimorfismo sexual es generalmente muy marcado y se manifiesta especialmente en la coloración alar, que es menos viva en la hembra.
Las larvas viven en las corrientes de agua clara y rica en oxÃgeno, y a veces en aguas menos móviles. Los adultos, de vuelo poco sostenido no se alejan mucho de estos ambientes. Atraviesan un perÃodo de maduración sexual del orden de unos quince dÃas, durante el cual se mantienen en lugares soleados y abrigados, respetando entre ellos una cierta distancia. Después de este perÃodo, el macho toma posesión de un territorio bien delimitado, que incluye posaderos, formados por tallos u hojas inclinados, y un lugar de puesta, al que vendrá la hembra para aparearse y poner sus huevos. Se alimentan de insectos (Tricópteros, Plecópteros, DÃpteros…) que capturan con ayuda de sus largas patas adaptadas a esta función. La vida de los imagos dura unas cinco o seis semanas. El apareamiento, precedido de un comportamiento precopulatorio especial con vuelo de parada, es el mismo tipo que entre las demás libélulas. Los machos de los Calopteygidae tienen, en la cara inferior de los tres últimos segmentos y sobre los apéndices abdominales, una coloración especÃfica muy diferente a la del resto del abdomen. Este al levantarse, deja a la vista dicho captaforos, que parece facilitar la localización por parte de los otros individuos, principalmente para el apareo. Durante la puesta que se realiza bajo la vigilancia del macho, la hembra se posa sobre vegetales flotantes y deposita sus huevos en cavidades horadadas por el ovipositor. Las larvas se encuentran principalmente cerca de la orilla, entre las raÃces sumergidas de las plantas, en donde se hallan, a veces, en gran número. Raramente nadan, sino que se desplazan andando sobre el substrato. Pasan el invierno en esta forma y al llegar la primavera se transforman en libélulas.